Andando el camino con una paleta de colores en la mano...

jueves, 15 de mayo de 2008

¡La lluvia llegó al desierto!

Regresando después de unas vacaciones casi forzadas, estas dos últimas semanas han sido rudas, muchos cambios en nuestra Tierra y por lo tanto en sus habitantes.
Nuestro planeta ha estado ajustándose a las nuevas energías. lo cual es evidente con sus bruscos movimientos incluyendo el gran terremoto en China, el ciclón en Myanmar, las erupciones volcánicas en Chile. Han sido grandes cambios y acomodos.
Personalmente yo también he tenido mis propios terremotos, mis embestidas ciclónicas y mis erupciones violentas, me gustaría saber si algunos de ustedes también han tenido que afrontar sus propios meteoros y demás.
Hoy en la mañana leía a Celia Fenn y ella mencionaba que todos estos cambios estaban muy relacionados con la liberación de apegos y de creencias pertenecientes a la tercera dimensión y por tanto a la vieja era.
Para mi fue muy evidente porque estos días pasados me he enfrentado a muchas de mis creencias y a soltar lo que ya no necesito, ha sido duro, mi cuerpo sobre todo lo ha resentido, todavía tengo algunos problemitas en mi ojo derecho, una ligera infección pero que me muestra que lo que veo no me ha gustado, he tenido incluso vómito y diarrea por situaciones que me han irritado, estoy limpiando, limpiando, drenando, soltando...
También me he enfrentado fuerte y drásticamente con "El Patriarcado" y con mi arquetipo de "la esclava" que estoy viviendo y liberando con ayuda de los hombres de la casa, mi esposo y mi hijo, sobre todo éste último me ha confrontado con mi sombra, muchos sentimientos ocultos o que yo creía curados han aflorado otra vez, sobre todo lo relacionado con mi negación a ser una mujer y a aprender a vivir en pareja y en familia.
Este chiquitín de tres años, tan inofensivo aparentemente me está mostrando de manera tremenda que todavía hay mucho que sanar y soltar, es increible que tanto he tenido que trabajar sólo por el hecho de ser su mamá, estoy aprendiendo a exigir respeto y trato amable, a pedir su cooperación a mantener cierto orden en casa, en fin este niño me ha dado cada madrazo, práctica y metafóricamente hablando, que he tenido que soltar muchas creencias que tenía relacionadas con mi idea de la maternidad y por lo tanto de ser la mujer de la casa. Estoy en el trayecto de pasar de ser "la esclava" o la "madre siniestra" a ser la reina de la casa y del hogar, punto de partida del equilibrio familiar y por lo tanto de la comunidad y de toda la humanidad. Si los individuos que forman las familias están fuera de su centro por consiguiente toda la humanidad estará en desequilibrio, me parece que ésta es una de las principales enseñanzas de este cambio planetario que nos está mostrando que la armonía en todas nuestras relaciones es indispensable y que las formas que típicamente hemos considerado ideales en la formación de vínculos cercanos, lo que hemos llamado "familia", no tienen porque ser de la misma manera, muy probablemente estaremos indagando sobre otras maneras de relacionarnos, sin apegos tan fuertes ni situaciones de dominio que muchas veces se han relacionado con la familia y la pareja, nos toca sanar todas estas creencias e ideas de "así ha sido siempre".
Y a los niños cristal, como Emiliano, les toca esto precisamente, venir a enseñarnos una nueva manera de vivir y convivir en esta nueva Tierra, y para ello debemos romper con muchas ideas, conceptos, prejuicios y demás cargas que traemos todavía en la espalda pero sobre todo en nuestras cabezas, todo esto está en nuestra mente.
Hoy puedo decir que estoy bien, estoy mejor y feliz, he aprendido mucho, he soltado más y sigo en el camino, como dice un refrán: "lo que no te mata te fortalece", y efectivamente así me siento hoy fortalecida, ayer estaba sin ánimo de nada y con una tremenda diarrea que inició con vómito en la mañana, en la tarde me dí el tiempo de trabajar con obsidiana, específicamente con la esfera Urantia, me tranquilizó mucho y luego una buena terapia con jade, que nos contacta con el arquetipo de la Madre, de la Diosa, y ayer necesitaba un buen apapacho materno, finalicé con unos 15 minutos tocando mi bowl de cuarzo y no diré que me sentí como nueva pero si muchísimo mejor.
Hoy estoy bien, me siento centrada, en equilibrio y con el ánimo para enfrentar lo que venga.
Hoy, Luna Eléctrica, estoy bien, con mis pies puestos en esta tierra y lista para seguir, y espero de todo corazón que tu también estés feliz y contenta alumbrando con tus rayos de luna a tu alrededor.
Hoy está lloviendo en Albuquerque, después de muchos meses hoy la lluvia ha refrescado la tierra sedienta de este desierto, hoy todas las flores y plantas están de fiesta, también todos los seres sintientes, se ha refrescado, ha llovido, hay agua para crear nueva vida y reforzar la que ya había.
Todos agradecemos el agua que nos ha traído esta luna. Hoy yo agradezco estar aquí y ahora.
Hoy la lluvia también me ha regado con sus gotas de esperanza.
La vida en el desierto es muy diferente de la vida en una ciudad de clima templado como el D.F. Te confronta también contigo mism@, Neruda también así lo sintió, quiero compartir uno de sus poemas que hace poco leí sobre sus impresiones del desierto:

NOCTURNO

Ven al circuito del desierto,
a la alta aérea noche de la pampa,
al círculo nocturno, espacio y astro
donde la zona del Tamarugal recoge
todo el silencio perdido en el tiempo.

Mil años de silencio en una copa
de azul calcáreo, de distancia y luna,
labran la geografía desnuda de la noche.

Yo te amo pura tierra, como tantas
cosas amé contrarias:
la flor, la calle, la abundancia, el rito.

Yo te amo hermana pura del océano.
Para mi fue difícil esta escuela vacía
en que no estaba el hombre, ni el muro, ni la planta
para apoyarme en algo.

Estaba solo.

Era llanura y soledad la vida.

Era éste el pecho varonil del mundo.

Y amé el sistema de tu forma recta,

la extensa precisión de tu vacío.



Un abrazo de desierto lluvioso para todos.

1 comentario:

Anando dijo...

De verdad que tienes razón, estas dos semanas han sido para mi también muy fuertes, no sabía bien el porque, solo las observaba y seguía la limpia. Y Ahora que lo dices si fue el ir dejando los apegos.
Gracias Veronica