Andando el camino con una paleta de colores en la mano...

sábado, 22 de marzo de 2008

Mensaje de un ser alado

Hola, que tal les fue ayer con todas estas energías juntas?
Kent, Emiliano y yo fuimos a un restaurante de comida mexicana y escuchamos mariachi, ayer yo quise celebrar y vivir desde la alegría, porque si bien se recuerda la crucifixión de Jesús, y muchas religiones se han quedado con eso, sin embargo a la muerte sigue la resurección y la iluminación. En la noche fuimos a la iglesia más vieja de Albuquerque, San Felipe Neri, estaban celebrando el Via Crucis, y aunque hace un rato ya no participo en ninguna institución religiosa, siempre me ha gustado escuchar los cantos en las iglesias, porque sobre todo son voces femeninas las que cantan, desde niña me ha fascinado escucharlos, incluso eso era lo único que me emocionaba cuando mi mamá me llevaba a las misas los domingos. En Navidad y en la semana santa es cuando más cantos hay, así que ayer le propuse a Kent que fueramos y si hubo algunos cantos, lo curioso fue que la mitad del rito lo hicieron en español y la otra mitad en inglés, pero todos los cantos me parece que fueron en español, después a las 8 de la noche hicieron una pequeña procesión, la procesión del silencio, había como 100 personas con velas, fue muy bonito el espectáculo y muchas mujeres y algunos hombres cantando. Los himnos sacros son divinos, estoy segura que cuando los oyes o cuando los cantas realmentes aumentas tu frecuencia y te conectas con lo divino.
Después antes de dormir hice mi meditación del Corazón sagrado, me gustó mucho, siempre que la hago me siento equilibrada y con fuerza para seguir el camino. Yo quería hacer una meditación en grupo pero las cosas se dieron diferente. Asi tenía que ser.
Y bueno, hoy en la mañana, llegando a mi trabajo, (porque el sábado de gloria estoy trabajando), me voy encontrando en el jardín ¿a quien creen?, pues nada más y nada menos que a un pato, si un pato silvestre que seguramente decidió pasar un rato en el jardín, que es muy bonito, tiene una fuente, pasto, árboles de pera y de durazno o ciruela floreando. Estaba muy tranquilo parado en una jardinera y cuando me vió se echó tranquilamente, cuando lo ví me maravillé, sabía que estaba ahí para darme un mensaje, ¿recuerdan que este equinoccio estuvo dedicado a los seres del aire?. Yo lo interpreto así: fué como si me dijera de alguna manera que estuvieron conscientes de la intención de la celebración y están ahí presentes, trabajando en equipo con nosotros que por fin accedimos a recordar su importancia y valor, así como de todos los otros seres sintientes de la Tierra.
¡Estoy contenta y emocionada!
Lástima que no traía mi cámara, ya necesito una digital pequeñita para llevarla a todos lados.
Bueno, pues quise compartir esta aventura y mensaje, porque también es para todos ustedes.
Un abrazo volador.

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